2/08/2019

A principios de junio, la Comisión Europea (CE) anunciaba que el Centro Nacional de Supercomputación -Barcelona Supercomputing Center (BSC)- sería la sede oficial que albergaría la instalación del prestigioso MareNostrum 5, uno de los superordenadores más emblemáticos a nivel mundial.

El MareNostrum 5 incluirá una plataforma experimental para garantizar, entre otras funciones, la independencia tecnológica del continente europeo, donde Estados Unidos o China se posicionan como lo grandes gigantes del sector de la computación.

El supercomputador barcelonés, que está previsto que se mantenga operativo durante 5 años y que tenga una potencia 17 veces superior al actual MareNostrum4, se instalará en un edificio de 700 m² de nueva creación, al lado de la capilla de la Torre Girona, en la Universitat Politècnica de Catalunya. Este gran aliado de la investigación, pues tiene la capacidad de ejecutar hasta 200.000 billones de operaciones por segundo, se pondrá en marcha el 31 de diciembre del 2020.

La totalidad del proyecto tendrá un coste de 223 millones de euros, de los cuales el 50% será financiado por la Unión Europea (UE). Mientras que el 50% restante irá a cargo del consorcio que ha respaldado la candidatura del Barcelona Supercomputing Center, formado por el Departament d’Empresa i Coneixement de la Generalitat de Catalunya, el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, la Universitat Politècnica de Catalunya, al igual que Portugal, Croacia y Turquía, como colaboradores europeos. Además, Irlanda está estudiando sumarse al consorcio, ya que también apoyó la propuesta a nivel político.

Con la implementación de este dispositivo, el BSC se posiciona como uno de los centros punteros en disciplinas que van desde la medicina, la biotecnología, las ciencias de la tierra, la astrofísica hasta la inteligencia artificial, entre otros ámbitos. De hecho, el Barcelona Supercomputing Center ha conseguido en los últimos años convertir los datos procesados en 185 artículos científicos, que se han divulgado en publicaciones muy reputadas a nivel mundial, además de 20 tesis doctorales y aproximadamente 90 conferencias. Aunque lo más importante de este supercomputador no es su rapidez y eficacia en los procedimientos de cálculo, sino la incorporación de una plataforma experimental que desarrolle nuevas tecnologías para optimizar la futura generación de supercomputadores. En definitiva, el MareNostrum 5 tendrá la finalidad de garantizar la soberanía informática de Europa y, de este modo, dejar de depender de otros países. En este sentido, el MareNostrum 6 -previsto para 2025- ya estará diseñado por completo con piezas europeas.

Las nuevas instalaciones requieren una potencia eléctrica muy elevada para su funcionamiento, del orden de 15MW. Para el suministro de energía, se prevé construir una nueva línea subterránea de 110kV de más de 1,2km, en doble circuito, y una nueva subestación subterránea equipada con celdas GIS 110kV de última tecnología  y dos  transformadores de 25MVA-110/25kV. Además, es necesario equipar la subestación con las correspondientes celdas primarias de media tensión y construir una nueva red de distribución de 25kV que interconecte todo el complejo. im3 realizará el proyecto constructivo, asistencia técnica de fase de licitación  y de la dirección de obra en fase de construcción y puesta en marcha de todas estas nuevas infraestructuras, tras haberse adjudicado los dos concursos públicos promovidos por el BSC para estos servicios.

La asignación de estos contratos ha tenido muy buena acogida entre los profesionales que conforman la multinacional IM3, pues les brinda la posibilidad de colaborar en uno de los proyectos de computación más ambiciosos a nivel internacional, contribuyendo a posicionar el Barcelona Supercomputing Center como el corazón de la supercomputación en Europa.